¿Cuánto tiempo y dinero has Perdido?
Querido/a lector, antes de empezar a leer este artículo, quería que hicieses un ejercicio de introspección y de sinceridad contigo mismo intentando responder a estas preguntas:
- ¿Cuántos cursos, cursillos, masters, etc. de fotografía has realizado en tu vida?
- ¿Cuánto dinero calculas que te has gastado?
- ¿Cuánto tiempo crees que has dedicado a formarte y aprender el oficio?
- Con toda sinceridad ¿Cuánto consideras que has aprendido?
- ¿En qué punto de tu viaje vital como fotógrafo te encuentras?
Yo he realizado estas preguntas a docenas de fotógrafos jóvenes y no tan jóvenes, y te vas a sorprender cuándo te cuente lo que me han respondido...
La mayoría, son autodidactas. Sí, como lo oyes. ¿Ninguno ha estudiado fotografía? ¡No, no me refiero a eso! Me refiero a que son autodidactas porque han aprendido la profesión, mediante ensayo y error, porque no han encontrado dónde ni quien les enseñe su profesión!
"La mayoría de los fotógrafos son autodidactas"
¿Y por qué? Porque los libros, cursos, masters, escuelas, material online, están en general muy alejados de la realidad del mercado fotográfico...
La queja más frecuente, para los que han estudiado algo es que, al terminar los estudios, sienten que no han aprendido lo necesario para desenvolverse en la realidad del mercado fotográfico, y que se sienten muy perdidos respecto a cómo continuar su camino profesional. Y lo que es peor, la mayoría fracasa en su intento de labrarse un camino en esta profesión y abandonan para siempre su sueño...
Tiempo y Dinero Perdidos
De media, entre los fotógrafos entrevistados, han dedicado más de 4 años en intentar formarse como fotógrafo profesional. ¡Es el tiempo que dura una carrera universitaria!
La mayoría dice haber invertido entre 2.000 € y 5.000 € en formación, tanto en centros, academias, escuelas y curso online.
"La mayoría dice haber invertido entre 2.000 € y 5.000 € en formación"
¿Y el resultado? Muchos solo ha conseguido algunos pocos trabajos mal remunerados y no recurrentes. Otros directamente han tirado la toalla (más del 50%, según estimaciones de los propios afectados).
Solo unos pocos han conseguido establecer su negocio, con clientes rentables y recurrentes y viven de su profesión...
¿Es aceptable que después de 4 años y varios miles de euros gastados no hayan conseguido vivir de tu profesión? No. Rotundamente no.
¿Te sientes reflejado de alguna manera? Lamentablemente, seguro que sí... Pero NO es tu culpa.
¿Es Culpa Mía?
Muchos se preguntan ¿Es culpa mía? ¿Quizá no valgo para esto? No. En absoluto. El problema es otro bien distinto: no te han enseñado qué tienes que hacer y cómo hacerlo. Simplemente eso.
"no te han enseñado qué tienes que hacer y cómo hacerlo"
¿Y cómo es posible que no exista formación de fotografía profesional en español, que sea eficaz, completa y que responda a las demandas reales del mercado? Pues se debe a la conjunción de varios factores...
Las Claves del Problema
Después de años investigando este problema -llevo recibiendo Currículos de fotógrafos desde hace más de 20 años- he llegado a la conclusión que destacan los siguientes factores como los culpables de esta situación...
1. Aspectos Culturales
Las culturas latinas tienen muchas cualidades muy positivas, entre ellas, una visión de la vida mucho más lúdica, cercana y divertida. La otra cara de la moneda, es que somos menos prácticos y disciplinados que nuestros amigos anglosajones...
Y esto se nota en la formación académica en general, y muy específicamente, en la de la fotografía profesional.
Y yo lo sé por experiencia: mis estudios primarios y secundarios los realicé en un colegio Británico en Roma. Luego hice la carrera en España. Y la diferencia fue sustancial...
En el colegio británico la forma de estudiar estaba basado en el razonamiento: no hacía falta memorizar casi nada. Si conocías y entendías bien la materia, aprobabas. Si no, no había forma de hacer trampa...
Mi sorpresa fue que al llegar a una universidad española (y además, ¡una de prestigio!) la forma de estudiar se basaba en la memoria. Podías aprobar perfectamente sin entender la materia realmente, solo con la memoria. Y lo que era peor, ¡podías suspender conociendo y entendiendo la materia, si no lo habías memorizado!
Conclusión: los anglosajones tienen un planteamiento mucho más pragmático y eficaz a la hora de abordar la formación en general. Por este motivo, los programas de fotografía en español, suelen ser muy teóricos y muy alejados de la realidad del mercado.
2. LA OPINIÓN PÚBLICA
Desde que aparecieron los smartphones con cámara, todos se han convertido en fotógrafos. El público en general, desconoce completamente cómo trabaja un fotógrafo profesional. Yo lo veo constantemente con los comentarios y las preguntas que me hace la gente durante las sesiones fotográficas donde hay público.
"Esa cámara debe hacer unas fotos fantásticas".
"Esa cámara debe hacer unas fotos fantásticas". Esto es lo que piensa la mayoría de la gente. Lo que te está diciendo es que, lo importante no es le fotógrafo, si no la cámara, que es la que consigue hacer buenas fotos. ¿Tremendo, no?
Ahora intenta extrapolar esto a otros campos. Por ejemplo, dile a un piloto de formula 1 que quien "conduce" es el coche, y que el piloto es secundario. O dile a Nadal que lo importante es su raqueta, que es la que da los buenos golpes, no él. O a un ingeniero informático dile que quien programa es la máquina, no él...
¿Es absurdo, verdad? Pues esto es lo que piensa la mayoría de la gente sobre los fotógrafos.
3. LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
A esto se le suma la visión totalmente sesgada de la mayoría de los medios de comunicación de masa. Haz el siguiente ejercicio: Intenta recordar la última vez que viste a un fotógrafo en la televisión...
¿Qué tipo de fotógrafo era? Seguramente o era un fotoperiodista de guerra o urbano, o un fotógrafo artístico que presentaba su exposición. ¿A que sí? Esta es la visión que tienen los medios en general, sobre la fotografía profesional.
¿Y que pasa con el fotógrafo de Arquitectura, el de Gastronomía, el Industrial, el de Publicidad, etc.? No existen para el gran público. O no interesan. Y sin embargo, constituyen el núcleo de la fotografía comercial. ¡Qué paradoja! ¿Verdad?
¿Y como influye esto en la formación? Pues mucho, porque los medios forjan la opinión pública en gran medida. Y esta a su vez crea las expectativas y demandas de la sociedad.
Si la opinión pública piensa que un fotógrafo es un artista, la gente querrá formarse como fotógrafo artístico. Pero nadie les advierte que por ese camino van directos al fracaso...
La demanda crea el producto o el servicio. Y el resultado -en parte- son los temarios artísticos y muy teóricos de las escuelas de fotografía.
4. el sesgo artístico
Este es un fenómeno que siempre me ha sorprendido. Si buceas en los temarios de fotografía, te darás rápidamente cuenta que que tienen un claro sesgo hacia lo artístico... ¿Sorprendente?
Para mi sí, ya que siempre he sabido distinguir muy bien entre el aspecto lúdico/artístico de la fotografía -que todos cultivamos y ¡debemos cultivar!- y el aspecto profesional. Es decir, lo que demanda tu cliente, el mercado en suma.
Y esta visión errónea se ha convertido en un verdadero lastre y motivo de fracaso de muchos aspirantes a fotógrafos.
Un fotógrafo comercial NO es un artista. Tu cliente NO te pide -ni necesita- arte. Necesita imágenes que le ayuden a vender sus productos o servicios. Punto. Si lo consiguen, eres un buen fotógrafo comercial.
Ahora bien, esas fotos que venden, seguramente que tendrán un componente estético -y por tanto artístico- destacado. Pero lo importante es entender que el proceso es a la inversa: primero concibes la fotografía comercial, y luego la produces de forma artística, es decir estética.
¿Y cuál es la diferencia? Pues que el artista crea las imágenes que él decide crear, sin intervención exterior de ningún tipo. Su único objetivo es crear algo que satisfaga su visión creativa. Nada más.
Puede darse el caso que su visión creativa coincida con las necesidades de un cliente, pero es la excepción a la regla...
Puedes ser un magnífico fotógrafo artístico, con magnificas fotos, pero si estas no sirven para lo que tu cliente te ha contratado, no sirven para nada...
5. Los Profesores
La realidad es que los fotógrafos profesionales de éxito no quieren o no les interesa ser profesores. Entonces ¿Quién enseña fotografía? Normalmente fotógrafos con el siguiente perfil:
- Han ejercido muy poco o nada como fotógrafos comerciales
- Han ejercido como fotógrafos comerciales pero no tuvieron éxito
- Entienden la fotografía como una disciplina artística y desdeñan la vertiente comercial
¿Qué visión del mercado fotográfico y de la fotografía crees que este tipo de perfil te puede transmitir? Pues uno muy teórico, alejado de la realidad. Si no estás en el mercado todos los días, haciendo presupuestos, hablando con clientes, realizando sesiones fotográficas, enfrentándote con problemas ¿Cómo vas a poder enseñar todo esto a tus alumnos?
Lamentablemente, lo que sucede es que aquellos fotógrafos que no han tenido éxito en su profesión, terminan ganándose la vida enseñando fotografía, en lugar de realizándola.
Por supuesto, no hay nada de malo en ello, y puede ser aceptable a la hora de enseñar la teoría básica, pero para cuestiones más avanzadas, no podrá enseñarte lo que realmente necesitas aprender.
6. Los Temarios
Yo realicé un análisis en detalle de más de 30 centros de enseñanza de fotografía, tanto online como presencial, y una de las cosas que más me llamó la atención es la ausencia de contenidos aplicados a la realidad.
Te voy a poner algún ejemplo:
- Marketing fotográfico: casi ningún temario lo aborda de forma seria. En el mejor de los casos, dan alguna pincelada superficial y poco más.
- Especialidades fotográficas: la mayoría de los temarios se centran en fotografía social, de retrato, moda o fotoperiodismo. ¿Y que pasa con la fotografía de arquitectura e interiores o la de producto y gastronomía, tan demandados, por ejemplo?
- Lo artístico: prevalece a lo largo de todo el temario, en detrimento de lo comercial, es decir, de lo que te permite vivir de tu profesión.
Conclusión
La fotografía comercial es la única que te permitirá vivir de esta profesión con garantías de futuro. Y esto es lo primero que un estudiante de fotografía profesional tiene que interiorizar. Partiendo de esta visión comercial, caminarás por un camino mucho más predecible y seguro, ya que tendrás muchas más posibilidades de alcanzar tu objetivo y no perderte por el camino.
Pero ¿Dónde y cómo aprender fotografía profesional? En mi opinión, los tres requisitos más importantes son:
- Aprender con un fotógrafo profesional que haya tenido éxito en su profesión, para que te enseñé todo lo que necesitas saber para tener éxito como fotógrafo profesional. Es decir, que te enseñe fotografía aplicada a la realidad.
- Que aprendas fotografía aplicada a las especialidades fotográficas. Es decir, de poco sirve que te enseñen qué es la profundidad de campo, si no te enseñan cómo la utilizan los distintos profesionales, ya que, por ejemplo, un fotógrafo de producto la utilizará de una manera muy distinta a uno de arquitectura, o uno de moda.
- Que te enseñen cómo convertir la fotografía en tu profesión. Es decir, cómo vivir de ella. Esto implica aprender a crear y gestionar una empresa, y a conseguir clientes rentables y recurrentes. Hay mucho buenos fotógrafos que han tenido que tirar la toalla porque no sabían como hacer todo esto...
En Miguel Merino Academy hemos establecido estos tres requisitos como la base de la enseñanza de todos nuestros cursos de Fotografía Profesional, para formar a fotógrafos que puedan manejarse en la realidad del mercado fotográfico con éxito.